Como resultado del aumento de los litigios, el envejecimiento de la infraestructura y el elevado escrutinio público, las entidades públicas necesitan adoptar un enfoque único en materia de seguros para proteger a sus ciudadanos y sus bienes que abarca:
- Gestión y responsabilidad profesional: estas políticas protegen a las entidades públicas y al personal frente a circunstancias que no están cubiertas por una póliza comercial tradicional. Estas circunstancias incluyen pérdidas causadas por un hecho ilícito que resulte en una pérdida mientras se llevan a cabo determinadas funciones por parte del grupo o en su nombre.
- Responsabilidad automovilística: los camiones de bomberos, las ambulancias, los coches patrulla, los autobuses, los vehículos de mantenimiento de carreteras y calles, y otros vehículos de emergencia requieren cobertura en caso de lesiones corporales o daños materiales.
- Riesgo cibernético: el resultado de un ciberataque puede conllevar graves consecuencias para una entidad pública, como fugas de datos, extorsión y fraude. Este tipo de cobertura suele incluir los gastos relacionados con las consecuencias mencionadas, así como aquellas derivadas de fallos relacionados con la seguridad de la información o la red.
Para las entidades públicas, el desarrollo de un enfoque integral de la gestión de riesgos implica abordar cada una de estas vulnerabilidades y aquellas relacionadas con sus ciudadanos o la realización de sus tareas diarias.
En Marsh, nuestros equipos locales, de análisis y de gestión de riesgos pueden ayudarle a desarrollar estrategias de gestión y financiación de riesgos que se adapten a sus necesidades con el fin de seguir respaldando al público al tiempo que se mitiga el riesgo.