Moto GP

Márquez-Bagnaia, fin de fiesta en las alturas

Ducati despide la presentación de su nueva dupla de campeones con máximas expectativas y una gran repercusión mediática

Marc y Pecco han participado en una prueba de esquí y luego han posado con sus motos en lo alto de los Dolomitas

Bagnaia, Márquez y el probador Pirro, con la cúpula de Ducati, encabezada por Gigi Dall'Igna

Bagnaia, Márquez y el probador Pirro, con la cúpula de Ducati, encabezada por Gigi Dall'Igna / L.L.A.

Laura López Albiac

Laura López Albiac

Marc Márquez y Pecco Bagnaia ya son oficialmente la dupla de campeones de Ducati. Después de la multitudinaria presentación del lunes en Madonna di Campiglio, la escuadra italiana ha despedido hoy su evento anual ‘Campioni in Pista’ en las alturas de los Dolomitas, subiendo sus flamantes Desmosedici GP25 hasta la estación alpina, donde los pilotos y los máximos responsables del equipo han posado para la posteridad, rodeados de majestuosas montañas.

Marc y Pecco por ahora mantienen un discurso conciliador y la consigna de colaborar para traer el título “de vuelta a casa”, después de que Jorge Martín se haya llevado el dorsal nº1 de campeón a Aprilia. Puede que el ‘buen rollo’ entre el catalán y el italiano no dure mucho. Quizá ya en el primer gran premio del calendario 2025, en Tailandia, empiecen las hostilidades en pista. Pero de momento, todo es armonía y buenas intenciones.

Este martes, ambos se lo han pasado en grande en la prueba de esquí organizada por Ducati en Madonna, aunque para Marc se trataba más de cumplir con el protocolo, que de competir: “Pronto me dí cuenta de que perdería esa carrera. Solo he esquiado diez días en mi vida”, decía con una sonrisa el '93', al que en condiciones normales, no le gusta perder “ni al parchís”.

Después, Pecco y Marc han seguido con su labor de su acercamiento en una rueda de preguntas que les ha permitido conocerse un poco más. “Es lo ideal, compartir estos momentos y en este escenario, relajados, porque cuando comiencen los test (a principios de febrero en Sepang), cada uno estará concentrado en su box, con sus ingenieros y mecánicos y será más complicado”, ha dicho Marc.

  “En realidad, en mi contrato con Ducati pone bien claro “no esquí”, pero como este es un evento que organizan ellos…  ¿Dónde está el señor Domenicali? No, no, todo el mundo está bien, pero lo disfrutamos mucho”, ha bromeado Marc, que en pocos días se ha metido en el bolsillo a sus nuevos jefes y también a la afición italiana, salvo a los ‘rossistas’ más recalcitrantes.

“Cuando estás en otro equipo y ves este tipo de eventos, quieres estar aquí. Para mí la presentación de ayer fue la más grande de un equipo en MotoGP y ahora ver que han subido la moto a las  montañas es algo increíble No es solo una presentación”, ha subrayado Márquez.

“Los dos últimos años estuve aquí con Enea, y ahora que Marc es mi compañero es una rutina para conocernos, una buena oportunidad para construir algo juntos con el equipo”, ha concedido Bagnaia. “Hay que crear esa gran atmósfera, crear la mejor moto, que ya está ahí, pero tenemos que mantener ese nivel”.

Los puntos fuertes de cada uno

 ¿Qué es lo más sorprendente que has aprendido de Pecco?, le han preguntado a Márquez: “Que siempre come y cena pollo”, ha dicho, provocando una sonrisa del italiano, con el que comparten otros aspectos en común. Ambos, por ejemplo, tienen perros de raza teckel. Stitch , el del español y Turbo, el del italiano.

También han recordado el momento en el que se tomaron una fotografía que estos días ha vuelto a ver la luz, de un Bagnaia adolescente junto a un joven Marc. “Recuerdo perfectamente el día. Fue en 2011, la temporada en la que él ganó en 125. Era el segundo o tercer test de la temporada con el equipo de competición de Molau en Castellolí. Él solo vino para saludarnos a mí y a Baldassarri y le pedí una foto. Queríamos ser como él”. ¿Quién iba a imaginar entonces que ambos estarían hoy sentados en sus Desmosedici en plenos Dolomitas.

No todo han sido momentos de armonía. Pecco y Marc han tenido que volver a hablar de su famoso incidente del pasado año en Portimao, cuando ambos se fueron al suelo por no ceder ni un milímetro. ¿Cambiará algo ahora que son compañeros?, les han preguntado. “Nadie quiere buscar una colisión, pero a veces cuando luchamos al límite, suceden estas cosas. En todo caso no fue una buena idea, los dos acabamos con cero puntos”.

¿Hay alguna habilidad que ves en tu compañero que te gustaría añadir a tu  pilotaje? Bagnaia lo tiene claro: “Marc posee dos habilidades impresionantes. La manera en la que entra en carrera en frío y la manera en la que toma el vértice de izquierda”.   Para Marc, el “punto fuerte de Pecco es la manera en la que aborda las curvas rápidas de derechas, así que intentaré aprender de él”.

Márquez se ha ido de Maddona rumbo a Valencia, donde tiene programados dos días de test con la Panigale V2S antes de que empiece la pretemporada en Sepang.