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Qué ver (y hacer) en Ibiza más allá de la fiesta
Aunque la mayoría de turistas llegan a Ibiza atraídos por sus calas y playas de agua cristalina y su oferta de ocio nocturno, la versión más auténtica y local de la isla se explora a través de sus pueblos. Estos son algunos de los que merecen una parada obligada (ordenados de sur a norte):
El pueblo más al norte de la isla es, también, el que acoge los últimos resquicios del espíritu hippie que caracterizó a Ibiza en la década de los 60. En Sant Joan de Labritja se respira un estilo de vida pausado y saludable que se extiende a los alojamientos turísticos: la localidad se caracteriza por un ambiente rural donde reinan los establecimientos agroturísticos. En el interior del municipio predominan las casas de piedra con sus balcones plagados de flores y macetas, una iglesia de cal blanca y calles adoquinadas. Además, los domingos se celebra un mercadillo de artesanía donde se pueden adquirir diferentes objetos y productos gastronómicos de la isla.
Aunque la mayoría de turistas orquestan su escapada a la isla en la temporada estival, quienes la visitan en los primeros meses del año pueden disfrutar del espectáculo de los almendros en flor, que acontece en la llanura de Pla Corona, justo al lado de Santa Agnés de Corona. La villa en sí es un paraíso interior donde descubrir la versión más auténtica de Ibiza: apenas un par de bares, una iglesia del s. XVIII y una pequeña tienda de comestibles que muestran otra cara de la isla, alejada del bullicio y la masificación de las zonas más concurridas.
Con un total de 32 playas y 80 km de costa, Sant Josep de Sa Talaia es el pueblo más conocido del sur de la isla, siendo el tercer municipio de Ibiza en población. A su ayuntamiento pertenecen otros pueblos más pequeños –como Sant Agustí des Vedrá, Es Cubells o Sant Jordi de ses Salines–, que merecen un recorrido completo. Además, en su territorio se ubican algunos parajes de visita obligada: el Parque Natural de ses Salines, la reserva natural de Es Vedrà, es Vedranell y de los islotes de Ponent, así como varias zonas calcificadas. Entre el resto de atractivos turísticos estacan las torres de defensa levantadas por los ibicencos entre los siglos XVII y XVVII o el asentamiento rural punicoromano de ses Païsses de Cala d’Hort. Y, por supuesto, una amplia oferta de restaurantes y bares donde degustar la gastronomía local.
Aunque es uno de los pueblos pertenecientes al municipio de Sant Josep de Sa Talaia, merecía una mención aparte. Es Cubells es la verdadera joya del sur de la isla, con paisajes costeros absolutamente asombrosos y una iglesia terminada en 1958 que refleja a la perfección la arquitectura ibicenca y protagoniza una postal idílica. Pero lo que genera más reclamo de esta localidad son las vistas que ofrece. Desde Es Cubells se puede ver una panorámica del cap Llentrisca, el puig des Savinar y cala d'Hort y los islotes de es Verá y es Vedranell.
El de Sant Jordi des Salines es el primer mercadillo de reliquias y piezas artesanales de la isla, que se celebra cada sábado desde 1995. El lugar donde se orquesta es el hipódromo de la localidad, muy cercano a la capital de Ibiza y donde residentes y visitantes se reúnen cada fin de semana en busca de libros, discos y vinilos, muebles y moda local.
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El horario del mercadillo de Sant Jordi es de las 8 horas hasta las 15 horas y conviene acercarse a primera hora para disfrutar de un desayuno de café y ensaimada con unas vistas inigualables. Una vez con el estómago lleno, es hora de bucear entre antigüedades y piezas de artesanía.
La finca ecológica certificada más grande de Ibiza promete una inmersión en la cara más salvaje y desconocida de la isla. Producen verduras, frutas y otros cultivos biodinámicos, así como huevos de corral, que no solo se venden al público sino que son los protagonistas de los platos que sirven en su taberna.
“Puedes visitar la finca para vernos trabajar o para recoger una de nuestras cestas de productos 100% ecológicos de temporada recién cosechados y listos para servir. Terra Masia también es el entorno perfecto para cenas “de la granja a la mesa”, salidas didácticas, talleres, eventos corporativos y actos sociales” explican desde la granja. Un lugar donde, al entrar, uno siente la energía y la paz que emanan del entorno.
Dónde dormir: los mejores hoteles de Ibiza para unas vacaciones de ensueño
En la Bahía de San Antonio acaba de abrir sus puertas, este mes de junio, el primer hotel del mundo dedicado exclusivamente a la moda abre sus puertas este mes de junio. Palm Springs sirve como telón de fondo para la construcción de Los Felices, un complejo con influencias mid-century e inspirado en el legado de estrellas como Bob Hope o Cher. Este es el último proyecto del grupo The Concept Hotels, donde han involucrado a un total de 113 diseñadores –tanto nacionales como internacionales, consolidados y emergentes– cuyas obras están presentes en las suites del hotel. El resultado: un destino tan estético como divertido.
Ubicado en Cala Gració este alojamiento supone una completa reinterpretación del servicio all inclusive solo para adultos, y esto se materializa gracias a su programa The Signature Level, una selección de beneficios exclusivos diseñados para elevar aún más la experiencia. TRS Ibiza destaca, además, por su espacio de bienestar Zentropia Palladium Spa & Wellness, un lugar concebido para el relax y la desconexión, con zona termal de aguas, tratamientos de belleza y exclusivas cabinas. Un lugar del que volver completamente renovado.
El resort mas destacable del extremo norte de la isla pitusa, Six Senses Ibiza da la bienvenida al verano con una oferta difícil de superar en la isla y unas vistas de ensueño en la Bahía de Cala Xarraca. Al entorno natural que rodea el complejo se suman todos los servicios e instalaciones que ofrece el hotel: sesiones de mindfulness, retiros holísticos, música en directo al aterdecer y una propuesta gastronómica centrada en la cocina mediterránea dirigida por el chef Eyal Shani. El complejo cuenta con 137 habitaciones, suites con piscina, residencias y cuevas en la playa que lo han posicionado entre los 50 mejores hoteles del mundo.
Las aguas cristalinas del norte dan la bienvenida al primer hotel solo para adultos de la cadena española en la isla. Con una fuerte apuesta por la gastronomía y la experiencia wellness, se convierte en el destino ideal para quienes buscan una estancia en torno al bienestar. La experiencia estrella de este alojamiento de lujo es el circuito de aguas al exterior, único en la oferta hotelera de Ibiza.
En primera línea de playa, en Santa Eulalia, se enclava este hotel de la vanguardista cadena norteamericana, convertido en referencia por sus sesiones de música en directo; sus experiencias gastronómicas –SEU Pizza @STEPS sirve la sexta mejor pizza del mundo–; una carta de tratamientos de belleza que se pueden disfrutar en suite con piscina privada, y el novísimo club de playa Yellow Fish frente al mar con una carta mediterránea y saludable basada en productos locales y de temporada. Entre sus próximas citas se encuentran los retiros de bienestar que se organizarán próximamente con una propuesta wellness tan innovadora como su filosofía e instalaciones.
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Hora de comer: los restaurantes de moda en la isla
Restaurantes, piscinas, instalaciones artísticas y un cabaret festivo. El Silencio es la versión elevada del tradicional chiringuito, que acaba de dar el pistoletazo de salida a su cuarta temporada. Rodeado de un paisaje idílico a orillas del mar, se define como un beach club donde naturaleza, gastronomía, música y arte interactúan libremente. Este año, además, presenta como novedad la apertura de la izakaya japonesa Urusai, en colaboración con el grupo parisino Onii, con el objetivo de crear una izakaya ibérica con una carta atrevida que destaca los productos de la isla a través del famoso estilo de las tabernas japonesas.
El negocio familiar de la saga Lucarini es todo un icono de la escena de ocio y gastronómica de la isla pitiusa. Desde 1981, Las dos Lunas (Ctra. Eivissa- Sant Antoni, km 5,4) es lugar de encuentro de todo tipo de turistas y visitantes. La pintoresca y colorida terraza que da la bienvenida al locales el espacio favorito de sus clientes, donde se sirven pastas caseras, antipastos clásicos y pescados y carnes con salsas y acompañamientos tradicionales. Imprescindible guardar sitio para el postre: son famosos su Tiramisú y su Cassata Siciliana.
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Lado se posiciona como una de las paradas obligadas en la escena gastronómica ibicenca. El restaurante, propiedad del empresario italiano Jordan Rocca y ubicado en Marina Botafoch –puerto marítimo y punto de encuentro de la jet set en la isla– ofrece una experiencia de altura . En 2024, el restaurante incorpora a los chefs Paco Budia y Marc Quesada, discípulos de Martín Berasategui, para dirigir una propuesta centrada en la tradición y los sabores de la cocina española. En su carta, pensada para compartir, destacan platos como el Pan brioche frito con atún rojo y caviar, el Muslo de pollo payés deshuesado y relleno o la Merluza en salsa verde con almejas.
La cocina mediterránea permite una infinidad de variaciones y se adapta a la perfección a la fusión con otras culturas. Buena prueba de ello es Tigre Morado, un restaurante ubicado en la playa de Port d’Es Torrent, que fusiona la gastronomía local y la cocina peruana. En su carta destacan platos como los Mariscos al fuego en mantequilla oriental, el Ceviche de corvina, el Pulpo anticullego, la Lubina a la chapa o el Sushi nikkei. Todo ello, acompañado de una interesante oferta de cócteles de autor y un escenario que permite disfrutar de puestas de sol idílicas.
La leyenda apunta a que el edificio donde hoy se ubica el restaurante Corsario fue morada de piratas hace siglos. Una construcción protagida del siglo X que ofrece una panorámica inmejorable de la zona amurallada y el puerto de Ibiza que acoge un proyecto gastronómico liderado por el joven chef Livan Valdés. En 2024, Valdés ha resdiseñado la carta, que él mismo define como "una propuesta gastronómica que pretende sorprender con una cocina donde brilla el producto local de temporada de pequeños productores, se revisan recetas tradicionales ibicencas y se emplean técnicas muy actuales de máximo aprovechamiento, fermentados o maduración de carnes y pescados.”
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