Dolores en el abdomen tras una cesárea
Hace cuatro meses me hicieron una cesárea y todavía tengo dolores en la tripa. El vientre se ha quedado duro y grande, y eso me preocupa.
El posparto es una etapa complicada y, si hablamos del posparto de una cesárea, se dificulta todavía más. A la lactancia posiblemente materna y a la presencia de un nuevo ser que cuidar, se suma una herida abdominal que debemos cuidar para evitar complicaciones posteriores.
Es muy importante entender que la recuperación de una cesárea es más lenta que un parto por vía vaginal. Generalmente la recuperación tarda entre diez y quince días, con dolores que pueden ser más o menos intensos (aunque siempre controlables con analgesia habitual), para posteriormente ir disminuyendo de intensidad y siendo poco a poco más leves. No obstante, hasta cuando se tengan estas molestias es muy variable, dependiendo de cada mujer y hasta de cada embarazo.
Cualquier cirugía mayor tiene una baja médica, cualquiera menos una cesárea según explicaba en redes la Doctora Elena Casado Pineda, terminando su explicación con una elocuente pregunta: “Este melón ¿para cuándo?”
La importancia de la cesárea
No debemos olvidar que la cesárea es una intervención quirúrgica y que, aunque aparentemente nosotros solo percibimos la cicatriz externa, se realizan varias capas de sutura en los diversos planos del abdomen.
Las molestias que se pueden percibir con el paso de las semanas, en gran cantidad de ocasiones son debidas a las suturas que se utilizan (coloquialmente hilos de sutura), que aunque son reabsorbibles, es decir, que con el paso del tiempo nuestro propio curso los "elimina", pueden tardar varias semanas en que esto ocurra. Por lo tanto las molestias persistirán mientras todavía no se hayan absorbido.
Los cambios en el abdomen tras una cesárea pueden ser mas marcados.
Tras una cesárea, al igual que tras un parto vaginal, el abdomen puede quedar más flácido y voluminoso. Poco a poco, con la recuperación de la musculatura abdominal y con el fortalecimiento del suelo pélvico, va volviendo a la normalidad.
Sin embargo, tras una cesárea, la zona cercana a la cicatriz abdominal puede presentar adherencias internas que provocan que la zona esté más endurecida e incluso dolorosa al tacto, con mayor sensibilidad. Además, estas adherencias no solo causan molestias en la zona de la cicatriz, sino que pueden provocar dolores abdominales inespecíficos.
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Rubén García Díaz
Una buena recuperación de la pared muscular abdominal es fundamental para mejorar todas las molestias que pueden producirse a nivel de abdomen tras una cesárea. Es importante que busques ayuda en profesionales especializados y que te asesoren cuando es el mejor momento para comenzar con la actividad física tras la cesárea. No obstante, la recuperación del suelo pélvico es prioritaria sobre la actividad muscular abdominal. De este modo, se puede recuperar el abdomen sin perjudicar el suelo pélvico.
Hacer una revisión del estado del suelo pélvico en el postparto (aunque el parto haya sido por cesarea), es imprescindible.
