Primeros sintetizadores controlados por tensión
A excepción del telarmonio, que fue concebido antes de la aparición de la válvula termiónica, los precursores del sintetizador actual se basaban en un sistema de circuitería de válvula. Esto hacía que los instrumentos resultaran pesados e inestables. Tras la aparición del transistor en 1947-1948, no tardaron en llegar otros instrumentos más resistentes, más pequeños y por tanto portátiles.
A finales de 1963, el innovador estadounidense R. A. (Bob) Moog conoció al compositor Herbert Deutsch. Deutsch inspiró a Moog para combinar un oscilador controlado por tensión y un módulo amplificador con un teclado y, en 1964, se creó el primer prototipo de un sintetizador controlado por tensión. Esta colaboración con el músico alemán alentó a Moog a extender su gama de módulos y a combinarlos para crear sistemas completos. Sin embargo, no fue hasta 1967 cuando Moog denominó a este tipo de sistemas combinados sintetizadores.
Los logros de Moog se fueron extendiendo de boca en boca y él, siempre dispuesto a escuchar la opinión de sus clientes, continuó añadiendo módulos a la gama. El LP Switched-On Bach, de Wendy Carlos (1968), fue el responsable del gran avance de los instrumentos de Moog. El disco incluía sintetizadores modulares de Moog, y fue una de las primeras grabaciones multipista del mercado. El éxito del álbum introdujo el sintetizador a una audiencia más amplia e hizo que el nombre de “Moog” fuese sinónimo de su instrumento. Con la idea de sacar provecho de los nuevos sonidos creados por los sintetizadores, para así repetir éxitos comerciales como el de Wendy Carlos, numerosos estudios, productores y músicos adquirieron los sintetizadores modulares Moog. En 1969, en las instalaciones de producción de Moog, 42 empleados fabricaban dos o tres sistemas modulares completos por semana.
En paralelo, un ingeniero llamado Donald Buchla había concebido y puesto en práctica el concepto de un sintetizador modular controlado por tensión. Esto coincidió con la versión de Moog. Buchla también desarrolló sus primeros instrumentos en estrecha cooperación con los usuarios. Para la creación de su primer sintetizador se inspiró en los compositores Morton Subotnik y Ramón Sender, del Tape Music Center de San Francisco. Aunque comenzó trabajando con este instrumento en 1963, su debut público no se produjo hasta 1966. Por razones de diseño, los instrumentos de Buchla se distribuyeron principalmente a academias y músicos de vanguardia, por lo que nunca cosecharon la atención y el elogio del público general alcanzado por los sintetizadores Moog.