Blog dedicado a los recién salidos de casa que no se resignan a malcomer y están dispuestos a dedicar un poco de tiempo a este menester. Cocinar para dos.Cocina de todos los días, aunque también para festivos.
miércoles, 11 de enero de 2012
Pata de pavo rellena
sábado, 31 de diciembre de 2011
Como deshuesar un pollo
Esto se puede hacer con cualquier tipo de ave: pollo, pato, pavo. Para perdices y codornices con huesos más blandos no hace falta abrirlos. Hacer sin abrir un pollo, cuesta mucho más tiempo y además en mi opinión, hay que poner demasiada carne como relleno.
Primer paso necesario para la receta anterior es conseguir un pollo deshuesado. Se puede optar por encargarlo o hágalo usted mismo. Si contáis el tiempo entre ir y venir a la pollería el día del encargo y el día de la recogida veréis que es mucho más que los 15 minutos de reloj que cuesta hacerlo en casa ( mención aparte del precio que cobran).
No sé si lo entenderéis bien, pero creo que entre las explicaciones y el vídeo está claro. Mi cámara, me ha ayudado a ello subiéndose a la escalera que aparece de vez en cuando. Voy a usar expresiones que no son muy académicas, pero si son muy gráficas. Si no las entendéis, por favor decídmelo, pues como yo lo veo tan claro a veces no veo la dificultad.
Si es posible, elegid un pollo grande, de más de dos kilos pues el rendimiento de carne es mucho mayor y es más sabroso. El objetivo es dejar toda la carne del pollo en un filete y sin romper la piel.
1 pollo grande, un buen cuchillo.
Quitar todos los restos de pluma y plumón que le queden al pollo, vaciadlo por dentro de todo resto que le pueda quedar. Quitar el ano sin cortar mucho.
Colocar el pollo con las pechugas hacia abajo y hacer un corte longitudinal, siguiendo la columna vertebral. Con la punta del cuchillo, separar la piel al principio y luego con la carne del hueso, teniendo especial cuidado en la cadera pues es donde más fácil se rompe la piel.
Seguir con el cuchillo las costillas para separar las pechugas del esqueleto. Cortad la articulación del ala para facilitar la separación.
Hacer un corte a lo largo del antemuslo siguiendo la linea del hueso y separar la carne. Romper la articulación que une con el muslo. Quitar el hueso
Ahora actuamos por fuera, es decir , por la parte de la piel. Hacer un corte circular alrededor del extremo del muslo y con el filo del cuchillo, "pelar el hueso". Consiste en arrastrar el cuchillo por el hueso para separar la carne.
Vamos otra vez al interior y cogiendo el hueso del muslo con la mano, cortar lo que queda de la articulación haciendo un corte circular, "pelando" también este hueso. Cuando esté bien separado, lo giramos y estirando lo sacaremos por arriba "volviendo del revés" la pata. Pondremos otra vez con forma de pata de pollo. Ya tenemos la mitad.
Hacer lo mismo con la otra mitad y tenemos el pollo deshuesado. Yo le quito todas la grasas posibles
Como podéis comprobar en el vídeo en menos de 15 minutos listo. Para que no sea demasiado largo, solo os pongo medio pollo, 5 minutos, ya que la otra mitad es igual. El video está sin editar, el tiempo es realmente lo que cuesta.
sábado, 19 de noviembre de 2011
Cocer Acelga
La acelga , quizá es la verdura más frecuente y fácil de cultivar en las huertas y por eso una de las más baratas en el mercado. No sé porqué, también una de las más odiadas por los niños pero eso se pasa con la edad ( en casi todos los casos).
800 gr de acelga, 1 patata ( tamaño a gusto), 4 cucharadas de aceite, 3 ajos.
Poner unos 10 cm de agua en el puchero elegido que tiene que ser alto pues al principio ocupa mucho sitio. Poner a hervir. Pelar la patata y partirla a trozos, añadirla al agua con una cucharilla de sal. Sobre una tabla de cortar, cortar el final del tronco y partir las hojas de acelga en rodajas de unos 2 cm ( sin que me oiga mi madre se puede hacer con toda la mata a la vez). Lavar en abundante agua pues a veces tiene tierra en el interior.
Escurrir y echar al puchero, tapar para que recupere antes la temperatura y contar unos 12-15 minutos. La decisión de si está cocida o nos la darán las pencas ( parte blanca), si clavamos un cuchillo, tiene que pasar con facilidad pero sin perder su tersura. Si en el agua de lavado ha salido tierra, en lugar de volcar todo sobre el escurridor, es mejor sacar la verdura con una espumadera; es la manera de que si ha quedado algo de tierra se quede en el fondo y no la echemos otra vez sobre nuestra acelga.
En el caso de usar olla expres, hay que probar las particularidades de la nuestra, en la mía con 4 minutos es suficiente enfriando rápido para que no se pase de cocción.
En el mismo puchero, añadir 3 cucharadas de aceite y los ajos pelados y partidos. Justo cuando se empiecen a dorar, añadir la verdura escurrida y dar unas vueltas, a mi me gusta partir más pequeña la patata con la espumadera.
Variantes:
- Añadir, a la vez que los ajos, una loncha de jamón o panceta. También algo de grasa de jamón retirándola antes de servir
- Con todo tipo de legumbres, me gustan mucho con garbanzos.
- Son intercambiables con las espinacas en casi todos los casos.
viernes, 11 de noviembre de 2011
Cuajada con nueces y membrillo
A mi paso por Pamplona, mis amigos me han regalado leche de oveja y cuajo. Antes, yo había preparado cuajada de manera más vulgar, con leche de vaca y un sobre comercial para su preparación ya que en mi sitio no tenemos esta opción más auténtica. Si no tenéis leche de oveja basta sustituirla por leche de vaca y seguir las instrucciones del preparación del sobre, esta no necesita cuajo, lo lleva incorporado en el sobre. No es lo mismo pero está buena.
Como la quería para un postre para gente más golosa que yo, he pensado adornarla con lo que tenía en casa. Abriendo la nevera y el congelador he encontrado mi membrillo y nueces.
Hay que preparar un litro completo pero se guarda bien en la nevera varios días en bote tapado. si no somos muchos es mejor hacerla en recipientes individuales
1l de leche de oveja, 18-20 gotas de cuajo ( es lo que ponen las instrucciones), 50 gr de membrillo, 6-8 nueces. Miel a gusto.
Templar la leche a unos 60º C ( que queme un poco). Picar a gusto el membrillo y las nueces.
Mientras tanto mojar el recipiente ( o varios) escurriendo bien el agua ( solo tiene que quedar húmedo). Añadir las gotas de cuajo e incorporar la leche. Pasados 2 minutos ( no mucho más pues cuaja muy pronto), añadir las nueces y el membrillo. La espera es para que no se vayan todos los tropezones al fondo o se queden en la superficie. Yo guardé un poco de membrillo para adornar.
Dejar reposar al menos 10 minutos sin mover. Tapar y guardar en la nevera. Servir con miel para que cada uno la incorpore a su gusto. Yo me la como sin miel pues el dulce del membrillo me resulta suficiente.
viernes, 21 de octubre de 2011
Como limpiar Borraja
Escribo sobre demanda. No había puesto una entrada que explicara como limpiar borraja por ser una verdura de uso minoritario, muchos ni siquiera la habréis visto en el mercado. Ahora se ha extendido su comercialización y la venden envasada y "limpia" ( partida) en algunas tiendas especializadas.
La variedades antiguas, había que emplearse a fondo en la limpieza, quitando la película exterior de los tallos y con ella los pequeños pinchos. Con la mejora genética ( que no transgénica), han salido al mercado variedades en las que la limpieza es muy fácil.
Normalmente solo se aprovechan los tallos. Las hojas más tiernas, se pueden guardar en nuestra bolsa de sopa en el congelador. No conviene usar muchas cada vez pues puede dar un toque oscuro a nuestra sopa. También se pueden usar las más jóvenes para croquetas empaquetadas.
Como tienen mucho desperdicio, necesitaremos unos 400 gr por persona aunque depende un poco de como las vayamos a hacer, de la cantidad de patata que añadimos etc...
800 gr de borraja, 1 patata, aceite y sal
La limpieza en sí es muy sencilla:
- Quitar la base del tronco y los tallos dañados exteriores
- Separar las hojas de los tallos
- Cortar los tallos a trozos de unos 3 cm.
Poner un puchero con agua y sal a hervir. Si vamos a usar patata las podemos echar en frío. Cuando hierva el agua, añadir la borraja y aunque el tiempo puede variar un poco, en aproximadamente unos 10-12 minutos estarán cocidas. En olla expres, como siempre depende de la olla. En la mía en 4 minutos, hechas.
Sacarlas del agua caliente y extenderlas, para que se enfríen de manera rápida, en cuanto estén blandas para preservar el color. Si quieres las puedes sumergir en agua muy fría como hacen en la hostelería pero pierden algo de sabor. A mi me gustan algo caldosas por lo que siempre guardo algo de líquido para añadir a mi plato.
Simplemente con un chorrito de aceite de oliva están inmejorables pero por supuesto que hay otras formas de tomarlas: en arroz, con almejas...
viernes, 9 de septiembre de 2011
Tomates secos
En todo el Mediterráneo se ha usado el sol para la conservación de los alimentos por deshidratación pero en España parece que lo teníamos un poco olvidado. Han tenido que llegar los italianos para recordarlo. De hecho, teniendo aquí zonas donde siempre se ha secado el tomate, los más conocidos en el mercado son italianos.
Todos los que tengamos una simple terraza soleada podemos hacerlo. También se puede intentar en la ventana aunque tenerla abierta en momentos de pleno sol no es lo que más apetece. También se puede hacer en el horno a baja temperatura pero creo que el gasto eléctrico no compensa.
Una fácil manera de aprovechar un exceso momentáneo de tomates aparte del consabido gazpacho y conserva de tomate. Hoy los he partido un poco más finos pues el calor ya no es de agosto.
Los usos del tomate seco son infinitos: sopas, arroces, ensaladas, guarnición, aperitivos...
Tomates, sal y sol por supuesto.
Partir los tomates a rodajas de unos 5 mm. Añadir sal y dejarlos escurrir.
Colocar bien extendidos si es posible sobre una rejilla ( otro método es papel de horno un poco engrasado) y esta sobre una bandeja para facilitar el transporte.
Exponerlo al sol todo el día( cuidado con las palomas, parásitas de las ciudades), darle la vuelta al llegar la noche. En lugares húmedos guardar, en casa por la noche. Sacarlos otra vez al día siguiente y repetir la operación hasta que estén completamente secos.
Yo antes de guardarlos los meto un poco al microondas para terminarlos de secar y evitar presencias indeseadas de hongos y mohos. Guardarlos en una bolsa de papel o lata con tapa, ayuda a que se conserven mejor.
domingo, 4 de septiembre de 2011
sopa de melón y espárragos
Lo que tiene el verano es que compartes casa con familia y amigos. En los distintos pases por la cocina de casi todos, siempre aprendes algo. En este caso fué M ª José la que nos obsequió con una mágnifica sopa fría, de poco trabajo y rápida de hacer, que nos gustó a todos.
Ingredientes fáciles de conseguir, casi de despensa en verano y se puede hacer tanto en el último momento para una improvisación, como por la mañanita temprano para que esté bien frío. Si lo queréis congelar tiene que ser antes de añadir el yogur y batir otra vez en el momento de servir.
El sabor dependerá un poco de la suerte que tengamos con el melón. Los muy dulces son los que menos me gustan para este plato y si nos sale uno un poco verde será una buena manera de aprovecharlo. Parece mucho melón, 1 kg, para dos pero yo es lo que he usado. El aceite y vinagre se puede modificar a gusto.
1 kilo de melón, 1 lata de espárragos blancos de 150 gr (escurrido), 1 yogur ( a ser posible de los cremosos), 2 lonchas de crujiente de jamón, 2 cucharadas de aceite, 1 de vinagre, sal.
Abrir la lata de espárragos y dejarla escurrir. Limpiar el melón de pepitas y corteza. Partir los espárragos a trozos pequeños para evitar que las fibras se enreden en la cuchilla de la batidora.
Poner en un recipiente hondo si usamos batidora de varilla, todos los ingredientes excepto el jamón. Batir con intensidad hasta que sea una crema. Meter en la nevera hasta su consumo.
Hacer el crujiente de jamón, trocearlo y servir sobre el plato de sopa.
lunes, 1 de agosto de 2011
Postre de cuajada y chocolate.
Postre para una cena improvisada rápido, barato y excelente para los poco golosos. Lo único especial que se necesita es un sobre de cuajada en polvo.
1 sobre de cuajada, 500 ml de leche, 150 gr de chocolate, 100 ml de vino dulce (Málaga, Oporto...), 4 madalenas o sobaos ( sirve cualquier bizcocho incluso aunque esté duro), pasas, ciruelas pasas, orejones, almendras picadas... a elegir o mezclar a gusto. Opcional: 2 cucharadas de miel
Picar muy bien los frutos secos. Remojar las madalenas en el vino dulce y picarlas. Mezclarlo todo.
Fundir el chocolate en el microondas a fuerza media unos 2 minutos, se termina de fundir con el calor residual.
Disolver los polvos de cuajada en un vaso de leche hasta que no haya grumos. Calentar el resto de la leche con la miel si nos gusta un poco más dulce. Cuando hierva añadir la cuajada disuelta moviendo sin parar. Cocer a fuego suave unos 3 minutos sin dejar de remover.
Añadir la mitad de la cuajada a las madalenas y la otra mitad al chocolate. En un recipiente que tenga el tamaño adecuado para esta cantidad ( unos 18x12x5 cm) poner rápidamente la mezcla de la madalenas y sobre ella la del chocolate ( si no nos damos un poco de prisa cuaja). Tapar con film transparente y guardar en la nevera unas 3-4 horas antes de comer.
También podemos variar el orden, queda incluso más bonito, una capa de cuajada blanca, las madalenas, y la cuajada con chocolate todo a capas.
Se puede servir solo, con nata o con mermelada; la de fresa o albaricoque le irá muy bien.
martes, 5 de abril de 2011
Hamburguesas de garbanzos
Suena un poco raro pero si os digo Falafools ( o falafels) quizá os resulta conocido.
Plato común tanto en árabes como en judíos ( en esto están de acuerdo) con todas las variantes de una receta popular. No es una receta fiel sino mi propia interpretación.
Esta han sido la improvisación de aprovechar un resto de garbanzos. Han ido como acompañamiento a un filete en lugar de patatas.
Si has añadido algo más de huevo del debido, añade un poco de puré de patata de sobre para poder moldearlas.
100 gr de garbanzos cocidos (pueden ser de bote), 1 diente de ajo, 1/4 de cebolla, perejil, 1 huevo, semillas de sésamo, aceite y sal. Opcional: comino, canela, pimentón, pimienta negra molida,.....
Sofreír el ajo y la cebolla picados con un poco de aceite a fuego suave. Pasar los garbanzos escurridos por el pasapurés o bien quitarles la piel ( queda mejor) y chafarlos con un tenedor, para formar una pasta fina. Añadir el ajo y la cebolla. Batir el huevo y añadirlo poco a poco, a cucharadas la cantidad necesaria para formar una masa espesa ( no hace falta usar todo el huevo). Cuando consideremos que es suficiente, añadir las especias y el perejil muy picado.
En una sartén poner una cucharada de aceite a fuego medio. Echar una cucharada a la sartén y chafar para formar una torta de unos 5 mm de grosor, dejar que se tueste y darle la vuelta con una pala para que no se rompa. Cuando el otro lado esté tostado, sacar y espolvorear con semillas de sésamo.
jueves, 24 de febrero de 2011
Otro Pollo chilindrón
En el modo anterior de pollo chilindrón os decía que no era mi estilo favorito pero me he reconciliado con el con esta nueva forma. Ha quedado estupendo, no solo de presentación sino también de sabor.
Es un poco laboriosa pero si la cogéis con ganas no es excesiva. Una vez deshuesado el pollo, que os lo pueden hacer en la pollería advirtiendo que conserven entera la piel, ya es casi como la otra receta.
He empleado muslos pero no hay inconveniente en que si os gusta más la pechuga uséis pechuga.
Si no te han deshuesado el pollo es la primera tarea. Lo primero, quitar la piel. Para esta receta yo dejo entera la parte del muslo pues así se rellena mejor, esto se hace muy bien haciendo un corte circular alrededor del final del muslo y luego ya empezamos por el contramuslo. A partir de aquí quita el hueso sin importar como pues vamos a trocear la carne.
Pelar y partir la cebolla a dados, partir los pimientos a dados. Hacer dos partes iguales de todo. Trocear la carne del pollo a dados. Partir el tomate natural a dados.
En un puchero, a fuego vivo, poner tres cucharadas de aceite y los ajos pelados, añadir el pollo troceado y dar unas vueltas. Pasados unos minutos, añadir la mitad de la cebolla y los pimientos, seguir moviendo y cocer unos minutos. Incorporar el tomillo y la pimienta si queréis. Echar la salsa de tomate y evaporar todo el líquido posible. Retirar de la cazuela y reservar.
En la misma cazuela, añadir tres cucharadas de aceite e incorporar la otra mitad de la cebolla y los pimientos. Saltear y cuando casi estén hechos, añadir el tomate natural. Sacar con una espumadera bien escurridos unas tres cucharadas de las verduras, reservarlas aparte. Triturar el resto para hacer la salsa.
Encender el horno a 180º. Mientras se hacen las hortalizas, extender la piel del pollo sobre un papel de aluminio
rellenarla con el pollo guisado en la primera parte.
Cerrar la piel formando un paquete, envolverlo con el papel de aluminio. Meter al horno 15 minutos. Pasado ese tiempo, destapar los paquetes y procurando que quede arriba la parte lisa del paquete, continuar un rato en el horno para que se doren.
Poner el paquete de pollo en un plato, las hortalizas en un montoncillo a su lado y regar las dos cosas con la salsa. Se puede servir con pasta pues los tragones no tienen bastante. Y esa noche había dos.
Yo siempre saco a la mesa una salsera para que cada unos se sirva a gusto. En algunos restaurantes sacan los platos muy bonitos con tres gotas de salsa, siendo que casi es lo mejor. Y luego seguro que tiran la salsa sobrante.
domingo, 7 de noviembre de 2010
Salsa de mango
En uno de mis viajes a Sudamérica, me sirvieron un aperitivo que un día verá la luz en mi otro Yo, con salsa de guayaba. Aquí es imposible encontrar una guayaba sabrosa cogida en su punto óptimo de maduración por lo que decidí cambiar la guayaba por mango fruta que si encuentro muy buena sobre todo en esta época del año. Recomiendo comprar mangos cultivados en España o los importados por avión son un poco más caros pero vale la pena.
El azúcar puede aumentar un poco o disminuir según gustos y la lima se puede sustituir por otro limón.
1 mango madurado en su árbol, 1 lima, 1 limón, 2 cucharadas de azúcar.
Pelar el mango y partirlo a trozos pequeños. Exprimir el limón y la lima. Poner el mango y el azúcar en un puchero pequeño a cocer a fuego suave. Cuando hierva, machacar con el borde de una espumadera, añadir la mitad del zumo e ir probando hasta que tenga la acidez que nos gusta. Para mi gusto necesito echar todo. Seguir machacando para obtener una salsa gruesa.
Puede acompañar a carne de cerdo, pollo o pescado rebozado. La acabo de comer con rape y ha sido sorprendente.
jueves, 28 de octubre de 2010
Ensalada de sepia y zamburiñas
Como podéis ver hice una buena compra de zamburiñas congeladas a buen precio y aprovecho las festividades familiares para usarlas. Es cómoda de hacer cuando hay mucha gente pues no da apenas trabajo. Lo que no impide darse un gusto algún día para uno solo pues todos los ingredientes son unitarios. Las cantidades son para dos personas.
Si no encontráis zamburiñas se pueden sustituir por gambas o langostinos.
1 bolsa de ensaladas variadas al gusto, media sepia pequeña, 4 zamburiñas congeladas, aceite, vinagre de Módena, sal.
Partir la sepia a láminas finas, si la sepia es congelada lo harás mejor si no está del todo descongelada.
En un frasco que cierre bien poner 2 cucharadas de aceite, 1 de vinagre y una pizca de sal, agitarlo muy bien.
Disponer las lechugas en una fuente. A fuego fuerte y con una cucharada de aceite, saltear la sepia. Saltear lo justo las zamburiñas. Esto se puede hacer con antelación. Si los cocemos mucho quedarán secos.
En el momento de servir, a fuego muy fuerte, calentar las zamburiñas y la sepia y extender por encima de la lechuga. Añadir la mitad del aliño y el resto servirlo en la mesa para que cada uno termine a su gusto. Este aliño se puede sustituir por otro de vuestro gusto
sábado, 9 de octubre de 2010
Merluza con gambas
La base de esta receta es la madre de todas las recetas de pescado en salsa: podemos cambiar el pez, añadir un adorno u otro, usar vino o agua pero las operaciones son las mismas.
Pasar el pescado por harina, sofreírlo un poco y añadir los adornos que nos gusten o dispongamos. En este caso tenía mejillones y gambas.
Yo compro una merluza, la pido abierta en dos lomos, uno nos lo comemos entre ese día y el siguiente y el otro lo congelo para otro día. Con las cabezas y espinas preparo caldo de pescado para una sopa ese día o congelarlo para el futuro.
Partir el filete de merluza en trozos de unos 5 cm. Poner la harina en un plato y pasar la merluza por ella sacudiendo el sobrante.
Lavar y pelar las gambas, guardar las cabezas y cáscaras, hacer un caldo con ellas. Limpiar los mejillones.
En una fuente resistente al fuego o en una sartén amplia, poner dos cucharadas de aceite, saltear a fuego medio un diente de ajo picado. Cuando empiece a tomar color, añadir las gambas justo para que tomen color, sacar bien escurridas y reservar en un plato.
En el mismo aceite, freír la merluza un minuto por cada lado.
Añadir 100 ml de agua y salar, subir el fuego hasta que hierva. Si lo hacéis con antelación, este es un buen momento de parar.
En el momento de servir, incorporar las gambas, los mejillones, tapar y mover un poco para que espese la salsa. Congela muy bien, podemos hacer dos raciones y guardarlo.
lunes, 4 de octubre de 2010
Sepia a la plancha
Esta es una receta de bueno, bonito, barato y además fácil y rápida. La sepia se puede comprar congelada y limpia, no es cara y baja en calorías para esos tiempos de control. Es un agradable segundo plato y con una ensalada una buena comida o cena, fácil de digerir y nos salimos un poco de la rutina.
Yo meto la sepia al microondas un rato para que "sude" el exceso de líquido y así pueda hacerse mejor a la plancha pues de otro modo, se cocería. El tiempo depende del tamaño de la sepia, el que pongo es orientativo para este peso.
Es también algo fácil de improvisar abriendo un congelador bien provisto, para una cena rápida a partir de "nada", como hay que meterla en el microondas solo tenemos que alargar un poco el tiempo
Limpiar la sepia de los posibles restos que tenga, quitar las aletas y patas, hacer unos cortes en los bordes del saco para que quede plana. Picar muy bien los ajos con 3 cucharadas de aceite y un poco de sal.
Meter la sepia en el microndas 3 minutos a fuerza media. Mientras tanto, poner a calentar la plancha.
Cuando la plancha este muy caliente, añadir con una cucharilla un poco de aceite aromatizado con ajo, colocar encima la sepia muy bien escurrida lo más plana posible . Después de 2 minutos darle la vuelta y otros dos minutos por el otro lado, regando de vez en cuando con más aceite y ahora si podemos añadir algo de ajo picado pero con cuidado de que no caiga a la plancha para que no se queme y amargue el plato. Si la plancha es suficientemente grande hacer a la vez las patas y aletas, si no repetir la operación con ellas.
Servir muy caliente, espolvoreada si quieres con perejil picado y/o alioli o mayonesa aromatizada con ajo.
viernes, 24 de septiembre de 2010
Zamburiñas a la plancha
Solo las había comido en lata y realmente no eran mi aperitivo preferido hasta que un día en una de esas escapadas que suelo hacer, en un restaurante de Lugo, uno de mis amigos las pidió para picar al centro de la mesa, no podía reconocer el sabor que yo tenía almacenado en mi cerebro de las zamburiñas de lata con la delicia que tenía delante.
La cocina gallega puede ser muy sencilla pero con su maravillosa materia prima tampoco hay que complicarse mucho la vida, punto exacto de cocción y un poco de aliño.
Encontré unas zamburiñas congeladas ( no es fácil encontrarlass frescas en mi zona) a precio razonable, que quedaron muy dignas cocinadas como las gallegas. Esta receta puede servir para cualquier concha.
6 zamburiñas. 2 dientes de ajo, aceite y sal.
Las zamburiñas congeladas salen abiertas y limpias pero conviene mirar por si tienen algo de arenilla. Pelar y picar muy pequeños los ajos mezclarlos con un poco de sal y aceite.
Calentar la plancha a alta temperatura, añadir unas gotas de aceite justo donde vas a poner la zamburiña con la carne tocando la plancha caliente. Después de 1 minuto, darles la vuelta de manera que sea la concha la que esté en contacto con la plancha. Añadir una cucharilla de aceite mezclado con ajo y dejar en la plancha 2 minutos.
Pasado este tiempo, sacar del fuego con cuidado para que no se caiga el jugo que habrá soltado llenando la concha, añadir un poco de sal. Servir inmediatamente
martes, 21 de septiembre de 2010
Gelatina de salsa de soja
Esto es un acompañamiento para carnes asadas, muy fácil de hacer y que da un toque distinto al asado o al filete. Es una salsa en sólido que se disuelve en contacto con la carne caliente. Otra idea es poner unos dados mezclados con ensalada, se mantendrán sólidos pero con una textura y sabor muy diferente al resto de los componentes del plato.
Las hojas de gelatina ahora las venden en cualquier supermercado, hay que comprar las que no tienen sabor añadido. Hay varias marcas.
Voy a poner las cantidades mínimas pero aún así sale suficiente como para 4 personas.
1 hoja de gelatina, 20 ml de salsa de soja, 30 ml de agua. Se puede aromatizar con algo de vino o licor restando el volumen de agua o soja. Yo a veces utilizo Oporto.
Remojar la hoja de gelatina en agua templada. Mezclar el agua menos 1 cucharada y la salsa de soja en un bol. Calentar la cucharada de agua y disolver la hoja de gelatina en ella.
Batir con energía la mezcla de agua y soja e ir añadiendo poco a poco la gelatina disuelta, seguir batiendo unos minutos. En el caso de que hiciéramos más cantidad podemos usar barillas para batir.
Volcarla en moldes de la forma deseada: pequeños dados, con formas diversas, uno grande para luego picarla de forma grosera ( no maleducada sino a trozos gruesos). Dejar enfriar en la nevera unas horas hasta que solidifique. El tiempo dependerá del tamaño del molde. En moldes de hielo, ha tardado 15 minutos.
Nos puede durar varios días en la nevera bien tapada, así que podemos guardar las sobras o prepararla con antelación.
jueves, 22 de julio de 2010
Ensalada de lentejas
Esto es una incorporación reciente a mis gustos. Las ensaladas de legumbre me las comía pero casi no las hacía. No era algo que yo tuviera en mi lista mental de posibles comidas. Ahora las estoy redescubriendo.
Es algo muy sencillo, que se puede hacer con lentejas cocidas en casa o con un bote de legumbre al natural, rápido, sano y nutritivo. Vamos, un bueno, bonito y barato.
Los ingredientes son variables en cantidad y variedad, nosotros pondremos lo que más nos guste y podemos poner y quitar según nuestra disponibilidad. Es un plato muy propio de que hago para cenar a partir de "nada". Miramos nuestra despensa y congelador y lo que tenemos, echamos.
200 gr de lentejas cocidas al natural, 1 tomate, media manzana, 2 zanahorias, 1 pimiento verde, media cebolla a ser posible tierna. Opcional: patata cocida, nueces, pasas u otras bayas secas, bacon muy picado frito...
Pelar y partir a trocitos muy pequeños la cebolla. Partir a daditos la manzana ( yo la pongo bien lavada pero sin pelar), la zanahoria, el tomate y el pimiento.
Poner una ensaladera con todos los ingredientes, ajustar la sal y rociar con un poco de aceite. En la mesa se servirá aparte algún aliño de ensaladas o simplemente un buen vinagre del tipo que nos guste.