What do you think?
Rate this book
232 pages, Paperback
First published February 7, 2008
“Lo que querría es salvarlo todo, lo que ha existido alrededor suyo, continuamente, salvar su circunstancia.”De esto se trata, de dejar constancia de una vida individual en el contexto social y sentimental en el que esta sucedió, “salvar algo del tiempo en el que ya no estaremos nunca más”, el mismo objetivo de Proust, uno de sus autores preferidos, aunque, obviamente, no comparta ni mirada ni experiencia vital ni estilo, lento, detallista, sentimental y laberíntico el de uno, seco, cortante, distante y directo el de la otra.
“Una de las grandes cuestiones susceptibles de hacer que avance el conocimiento de sí es la posibilidad o la imposibilidad de determinar cómo, en cada edad, cada año de la existencia, se representa uno el pasado.”Y así es como ella procede en esta nueva entrega, nueva para mí, de Ernaux: una sucesión de párrafos cortos sobre un sinfín de detalles de su vida personal y colectiva a lo largo de más de sesenta años, y como esos recuerdos, así como la idea que iba teniendo de sí misma y de sus futuros deseados en cada uno de los presentes, han ido también cambiando a lo largo de Los años.
“Todo se borrará en un segundo. El diccionario acumulado de la cuna hasta el lecho de muerte se eliminará. Llegará el silencio y no habrá palabras para decirlo. De la boca abierta no saldrá nada. Ni yo ni mí. La lengua seguirá poniendo el mundo en palabras. En las conversaciones en torno a una mesa familiar seremos tan solo un nombre, cada vez más sin rostro, hasta desaparecer en la masa anónima de una generación remota”.No obstante, he caminado gustoso a su lado durante todo su periplo personal, una historia marcada por victorias que terminaron convirtiéndose en derrotas: empezando por su paso por la universidad que acabó por sentir como la ruptura con su mundo de origen, las grandes ilusiones y decepciones políticas —mayo del 68, Mitterrand, la igualdad entre hombres y mujeres (creo que las mujeres también lo disfrutarán aún más que nosotros)…—, su matrimonio, la llegada de nuevos tiempos en los que “la profusión de cosas escondía la escasez de ideas y el desgaste de las creencias”, hasta ese momento en el que nos damos cuenta que hemos pasado de relegar a nuestros padres por haberse quedados anclados en el pasado a ser arrinconados por nuestros hijos que, al igual que nosotros unos años antes, en la seguridad de saberlo todo de la vida, se burlan de nuestra incompetencia y de nuestras trasnochadas ideas sobre casi todo, hasta ese momento, vivido como la derrota definitiva, en el que somos conscientes de que el futuro ha dejado de ser un “espacio de fondo ilimitado”.
“Le invadía la vieja impresión de sentirse fuera de la fiesta.”Una novela de derrotas que sin embargo termina con una gran victoria, la escritura de esta novela para la que tanto esfuerzo gastó durante años hasta encontrar la forma definitiva y que consiguió salvando tanto a una tercera persona con su “demasiada exterioridad, alejamiento” como a la primera y su “demasiada permanencia, estrechez, asfixia” y con la que consigue emocionar sin buscarlo, invitándonos e incitándonos a repasar también nuestra vida y volver a aquellos hechos, propios y colectivos, que marcaron las etapas de nuestra historia y así, como la autora, poder “unir esas múltiples imágenes de ella, separadas, desajustadas, mediante el hilo de un relato, el de su existencia”.
By retrieving the memory of collective memory in an individual memory, she will capture the lived dimension of History [...] It will be a slippery narrative composed of an unremitting continuous tense, absolute, devouring the present as it goes [...] To this 'incessantly other' of photos will correspond in mirror image, the 'she' of writing [...] There is no 'I' in what she views as a sort of impersonal autobiography. There is only 'one' and 'we'
la seule écriture juste m'a paru être le refus de toute fiction et ce que j'ai appelé ensuite "l'autosociobiographie" parce que je me fonde presque toujours sur un rapport de soi à la réalité sociohistorique.and indeed The Years might perhaps best be described as a 'novel without fiction' as Javier Cercas describes many of his books in his essay (tr. Anne McLean) The Blind Spot: An Essay on the Novel, including his The Impostor (tr. Frank Wynne), a book also longlisted for the Man Booker International Prize, a prize for 'novels and short-stories'. Indeed Les années was published as 'un roman' in France but The Years under Fitzcarraldo's white covers (usually for essays) here, although UK ISBN registration covers 'essay', 'memoir', and 'literary fiction in translation', and the MBI judges are to be congratulated for acknowledging its eligibility.
https://www.lemonde.fr/livres/article...
(translation: the only writing that seemed fair to me was that which refused fiction altogether, which I later called autosociobiographie because I nearly always placed myself at the meeting of self and sociohistorical reality.)
Strayer has learned some tricks along the way, including visits to some of Monsieur Google’s more obscure domains. It also helps to be living in Paris with a French husband whose family could apparently win any French Trivial Pursuit contest.https://artsfile.ca/ex-pat-ottawa-tra...
“I had only to present a snippet of a popular song, an advertising jingle, joke or spoonerism, a quip from a ‘50s comedian, whatever the case, and someone would promptly recite it in full and provide necessary explanations,” Strayer said in a recent email interview.
“the idea has come to her to write a “kind of woman’s destiny”, set between 1940 and 1985. It would be something like Maupassant’s “A Life” and convey the passage of time inside and outside of herself, in History, a “total novel” that would end with her dispossession of people and things”