Las uvas son uno de los alimentos que no puede faltar en la mesa en la cena de Año Nuevo. Ya sean verdes o rojas, comerlas es un ritual de Año Nuevo que prácticamente todo el mundo lleva a cabo pero ¿realmente sabemos su origen?
Lo que sí sabemos es que están relacionadas con los deseos que tenemos para el año que comienza. Digamos que son una excelente manera de intencionar lo que queremos que suceda en los próximos 365 (súmale un día si el que viene es un año bisiesto) en los que, desde luego, no debemos dejar todo al destino sino que debemos tener clara la meta y trabajar duro para llegar a ella.
Mientras tanto resolveremos esta gran duda ¿por qué comemos uvas en Año Nuevo?
Significado de las uvas en la cultura
¿Por qué se comen uvas en Año Nuevo? Existiendo tantas frutas alguien decidió que se tenían que comer uvas así que hablemos del significado de este fruto en la cultura.
El símbolo de la uva está relacionado con la espiritualidad y la fertilidad ya que está bastante presente en diferentes pasajes de La Biblia. Cuando Noé salió del Arca, una vez que pasó el diluvio universal, cultivó una viña como sus primeras plantas con las que, después, elaboró vino que sería uno de los símbolos más importantes de La Última Cena.
Origen de la tradición de comer uvas en Año Nuevo
La tradición de comer 12 uvas en Año Nuevo es totalmente europea y llegó a México a principios del siglo XX.
Una teoría apunta a que durante la década de 1880, la clase burguesa de España comenzó a imitar la costumbre de los franceses de comer uvas y tomar vino espumeante durante la Noche Vieja. Esto es convirtió en una tradición que, primero, comenzó a llevarse a cabo en dicho país para después llevar del otro lado del océano hasta llegar a México.
Otra teoría señala que en 1909, los productores de vino de Alicante, España, tuvieron una cosecha de uvas blancas (Aledo) tan buena que buscaron diferentes maneras de vender su excedente por lo que se les ocurrió venderlas como “uvas de la suerte”.
¿Por qué se comen uvas en Año Nuevo?
Aunque no es claro cuál de estas teorías es la que realmente dio origen a esta tradición que, al menos, se lleva a cabo en todo México y en algunas parte de Estados Unidos, lo cierto es que comemos 12 uvas porque cada una representa un mes del año.
Comemos uvas cuando suenan las doce campanadas para indicar que entró un nuevo año, cada una simboliza uno de nuestros deseos para el ciclo que comienza y lo que hacemos es intencionarlas, es decir, cada una representa una de estas metas o deseos que tenemos.
Tradiciones de Año Nuevo en Latinoamérica
No todos los países tienen la costumbre de comer uvas para intencionar el año que inicia y una de las razones es porque este fruto no se da en algunas regiones de Latinoamérica durante esta época del año.
En Colombia, Perú, Ecuador y Venezuela, por ejemplo, se lleva a cabo la lleva a cabo la quema del muñeco que es, literalmente, un muñeco gigante que simboliza el Año Viejo, también llamado El Viejo, hecho de materiales flamables. La tradición consiste en prenderle fuego ya que representa deshacerse de los malos momentos del ciclo que termina y, digamos, así alejarlos completamente.
En la región de Brasil que cuenta con playa y en algunos países de Caribe se acostumbra ir al mar a medianoche para saltar siete olas, cada salto va acompañado de un deseo y deben ser de frente al mar.
El mar tiene una relación importante con la purificación por lo que permite que las personas lleguen, digamos, limpias para empezar un nuevo año.