Valla de Melilla
El Muro de Melilla es una barrera física de separación entre Marruecos y la ciudad de Melilla, un enclave africano de España. Su propósito es detener la inmigración ilegal y el contrabando comercial. Esta fabricado de alambre con filos tipo navaja y su costo fue de 33 millones de euros. Consiste de 11 km de vallas paralelas de 3 metros de altura con alambres de púas encima, existen puestos alternados de vigilancia y caminos entre las vallas para el paso de vehículos de vigilancia. Cables bajo el suelo conectan una red de sensores elctrónicos de ruido y movimiento. Esta equipada con luces de alta intensidad y videocámaras de vigilancia. Su altura se esta doblando a 6 metros debido a la crisis de inmigrantes en masa en septiembre y noviembre del 2005 provenientes del cercano campamento de Gurugu.
En octubre del 2005, más de 700 migrantes subsaharianos desarmados intentaron entrar en territorio español desde la frontera marroquí. Muchos de ellos fueron baleados por la espalda, supuestamente por guardias marroquis. Tambien existen acusaciones de que la policia española habría participado en el tiroteo. Amnistía Internacional y Médicos sin fronteras han acusado al gobierno de Marruecos de haber abandonado a más de 500 refugiados en el Desierto del Sahara sin comida o agua.
Marruecos ha objetado la construcción de la barrera, ya que considera Melilla como parte del territorio marroquí ocupado y para ello ha solicitado desde 1975, su devolución.